Voto por apoyar el cine nacional antes, ahora y lo que venga!

Siempre he creído que para que el cine nacional avance y a ojos de la mayoría mejore es cuestión de tiempo; y para todos aquellos que se oponen fervientemente al cine nacional vociferando que todo es malo, que están mamados del traqueto, de la prostituta, en fin… drogas, sexo y en los mejores casos acción, en general para todos aquellos que se rasgan las vestiduras en la calle, les tengo la siguiente analogía: El cine nacional le pasa lo mismo que a usted cuando le empezaron a dar dinero para las onces.
Se acuerda ud. Cuando le tocaba llevar lonchera en el colegio?
Recuerda que era probable que le empacaran algo que a usted no le gustara o le hicieran pasar algún oso como el huevo duro o el banano de sorpresa en la lonchera?
Esa era la época en que ud no tenía ni voz ni voto sobre lo que consumía en su hora de descanso…
Ahora; recuerda cuando le empezaron a dar dinero para las onces, talvez una vez por semana y justo ese día decidía llenarse de las viandas que más le gustaban y era probable que terminará con dolor de panza por comer en exceso?... pero era comprensible, la primera vez que le dan la oportunidad de comer eso que tanto deseaba, de escogerlo, que le daban el espacio… pues bien, así le sucedió al cine nacional… se podía hacer una película cada dos años o cada año por cuestiones de presupuesto y otros inconvenientes, y tocaba aprovechar esa película anual para describir, criticar y hasta proponer una solución a la realidad nacional, de ahí sacamos esas películas mamertas y para algunos difíciles de ver o de temas repetitivos como el traqueto, drogas y demás porque era lo que marcaba en su momento al país y había que contarlo… se abusó con los temas? Sí, un poco pero con semejante papayazo para contarle al mundo quiénes éramos y qué nos pasaba, totalmente comprensible.

Recuerde también cuando ya el dinero de las onces no era una cosa extraordinaria sino del día a día… ya no se atiborraba de comida sino que empezó a ser selectivo y su dieta mejoró; así le pasa al cine nacional… ahora hay más presupuesto, podemos hacer más de una película al año y no hay que contar la vida y obra del país en una sola toma, en una sola película y hemos llegado a películas como Satanás, Bluff, El Final del Espectro y espero con fé y paciencia a muchas otras películas que serán mejores en temática, producción, fotografía y sonido. Vamos paso a paso construyendo entre todos una cinematografía nacional, pero para eso hay que irlas a ver al teatro… pagar la boletica y verificar que con la practica se construye industria; no sólo hay que invertirle a duro de matar 4.

Y para que vean que no todo pasado fue peor aquí les recomiendo algunas películas viejitas pero sabrosas:

Confesiones a laura (1991)
El taxista millonario (1979)
Cóndores no entierran todos los días (1984)